
Israel localiza y elimina a Yahya Sinwar, líder de Hamás
Gaza, 19 de octubre de 2024 — El conflicto entre Israel y Hamás ha alcanzado un nuevo punto crítico tras la muerte de Yahya Sinwar, el máximo líder de la organización islámica en Gaza. Su eliminación, confirmada el pasado viernes por Khalil al-Hayya, jefe adjunto de Hamás, representa un hito significativo en la larga y compleja lucha que ha caracterizado la región durante décadas.
Sinwar, de 61 años, había estado en la mira de las fuerzas israelíes desde hace más de un año, especialmente después de los devastadores ataques del 7 de octubre, que dejaron un saldo trágico de miles de muertos y heridos en ambos lados del conflicto. Desde entonces, su paradero era un misterio. Se informaba que se encontraba oculto en los extensos túneles que serpentean por la Franja de Gaza, acompañado de un reducido grupo de guardaespaldas y de un contingente de rehenes israelíes, que supuestamente servían como “escudo humano”.
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Los túneles, construidos por Hamás a lo largo de los años, han proporcionado una red compleja que permite a sus líderes y combatientes desplazarse sin ser detectados. Sin embargo, este entorno también presenta riesgos significativos. Según fuentes militares israelíes, Sinwar estaba cada vez más aislado y su capacidad para comunicarse y coordinarse con otros líderes de Hamás se veía limitada.
El cambio en la situación de Sinwar ocurrió de manera inesperada. Un encuentro fortuito con una patrulla israelí en el sur de Gaza llevó a un enfrentamiento directo, donde, según informes preliminares, Sinwar no estaba acompañado por los rehenes que se habían mencionado anteriormente. Esto sugiere que su entorno de seguridad había disminuido, quizás por la creciente presión de las operaciones militares israelíes en la región.
El gobierno israelí había intensificado sus esfuerzos de inteligencia en los últimos meses, enfocándose no solo en la eliminación de altos líderes de Hamás, sino también en la recopilación de información sobre sus actividades y movimientos. Esta estrategia incluyó el uso de tecnología avanzada y la colaboración con agencias de inteligencia internacionales.
La muerte de Sinwar ha generado una oleada de reacciones tanto en Gaza como en la comunidad internacional. Khalil al-Hayya, en un discurso publicado en video, reafirmó el compromiso de Hamás de continuar con su lucha por las “ambiciones del pueblo palestino”, y advirtió que no liberarán a los rehenes israelíes hasta que Israel finalice su operación militar y se retire por completo de Gaza. Esta declaración marca un escalón más en la escalada del conflicto, que se ha intensificado desde el inicio de las operaciones militares.
Desde que comenzaron los ataques el 7 de octubre, la región ha sido escenario de una creciente violencia, con la población civil de Gaza sufriendo gravemente las consecuencias. La comunidad internacional ha expresado preocupación por la situación humanitaria, mientras que las tensiones entre las fuerzas israelíes y las facciones palestinas continúan elevándose.
En los días siguientes a la muerte de Sinwar, se anticipa que Hamás podría responder de manera contundente, tanto militar como políticamente. Históricamente, la eliminación de líderes clave en organizaciones militantes ha llevado a represalias que a menudo afectan a la población civil y exacerban el ciclo de violencia.
Yahya Sinwar fue un actor fundamental en la política de Hamás y su estrategia militar. Ascendió al poder tras su liberación de prisión en 2011, donde había estado encarcelado por su participación en actividades relacionadas con la resistencia armada contra Israel. Su liderazgo se caracterizó por un enfoque más agresivo hacia la confrontación con el estado israelí, especialmente en el marco de los recientes conflictos.
Desde su liderazgo, Sinwar supervisó varias operaciones militares contra Israel, incluidas las guerras de Gaza en 2014 y 2021. Su muerte no solo representa una pérdida significativa para Hamás, sino que también podría reconfigurar la dinámica de poder dentro de la organización y en la región.
A medida que la noticia de la muerte de Sinwar se difunde, las fuerzas israelíes están en alerta máxima ante posibles represalias de Hamás. Las tensiones ya habían alcanzado niveles peligrosos, y la eliminación de un líder tan influyente podría tener consecuencias imprevistas en el conflicto en curso.
El escenario en Gaza sigue siendo tenso, con el miedo a una escalada militar constante. Las organizaciones humanitarias advierten que la población civil podría enfrentar aún más sufrimiento, a medida que ambos lados se preparan para una posible intensificación del conflicto.
Este evento marca otro capítulo en la larga historia de violencia y confrontación en la región, un recordatorio de que la paz sigue siendo un objetivo elusivo y difícil de alcanzar en medio de un entorno tan volátil.